En los últimos años, la ropa de grafeno, ha sido de gran ayuda para la creación de tejidos que actúan como barrera a productos químicos tóxicos, por eso llamó tanto la atención de científicos de la Universidad de Brown, quienes se dieron a la tarea de comprobar si este tipo de telas podían evitar picaduras de mosquitos.
El grafeno ofrece una barrera física para la picadura, pero también impide que los mosquitos perciban las señales químicas que indican la presencia de sangre.
En el artículo publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences, informó que los valientes voluntarios se ofrecieron a introducir su brazo en el interior de una cámara llena de mosquitos. Algunos tenían una extremidad desnuda y otros recubierta por una película de óxido de grafeno (GO).
Los investigadores encontraron que el grafeno era un elemento disuasorio para la picadura. Cuando la piel estaba cubierta por películas secas, los participantes no recibían una sola picadura, mientras que la piel desnuda y la cubierta con gasa, la picaban fácilmente.
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