Investigadores del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y Electrónica (INAOE), diseñaron un dispositivo que utiliza tecnología láser para disparar líquidos a una alta velocidad y perforar la piel sin dolor.
El dispositivo funciona gracias al uso de un láser infrarrojo, cuyo haz de luz se enfoca en una solución especial a base de agua para aumentar su temperatura.
Para lograr que el fluido salga disparado del prototipo, los científicos mexicanos adaptaron un pequeño canal, mismo que al reducir su diámetro aumenta la velocidad de escape hasta 100 metros por segundo.
Debido a la velocidad del fenómeno, para lograr observar a detalle la forma del chorro y analizar la rapidez de salida del líquido expulsado por la burbuja, se ha utilizado una cámara ultra rápida que hace entre 100 mil y medio millón de tomas por segundo.
Además, se realizan pruebas de penetración de los chorros con un material llamado agar, sin embargo, aún deben realizarse pruebas en piel de cerdo y humana.
Actualmente el prototipo tiene una dimensión de un metro en cada uno de sus lados debido a sus componentes actuales, pero se busca cambiar el láser utilizado por uno de fibra, el cual tiene el grosor de un cabello, para tener un dispositivo más compacto y fácilmente manejable.