Un grupo de farmacólogos liderados por la doctora Maria Croyle de la Universidad de Texas, en Austin, han desarrollado un nuevo método que permite crear vacunas sin agujas, que se toman como un caramelo, esto de acuerdo al portal de ciencia y tecnología, Agencia ID.
Todos los laboratorios del mundo están inmersos estos días en una carrera contrarreloj para desarrollar la vacuna contra el coronavirus. Pero cuando esa vacuna esté disponible, queda la complicada tarea de distribuirla a la población. La mayoría de las vacunas se suministran por medio de una inyección, pero es un proceso caro, que exige tiempo (ya que la vacuna debe ponerla un médico o enfermero), y produce una gran cantidad de desechos.
En 2004, una campaña masiva contra el sarampión en Filipinas supuso la vacunación de 18 millones de niños, lo que ocasionó unos desechos de 19,5 millones de jeringuillas. En total 140 toneladas de basura punzante y 80 toneladas de residuos no tóxicos: plásticos, algodones, ampollas, etc. Con este nuevo método que usa vacunas sin agujas que se toman como un caramelo, solo se necesita un sobre que contiene la vacuna. No es necesario que la suministre un facultativo, y genera cero residuos.
Otra ventaja muy importante es que este nuevo tipo de vacuna en forma de caramelo usa ingredientes fáciles de conseguir, es barata y sencilla de fabricar y, aún más importante, se conserva a temperatura ambiente.
La doctora Maria Croyle asegura que la inspiración para crear esa vacuna le llegó cuando observó cómo el ADN se conserva millones de años en el ámbar. Así que se le ocurrió que podrían intentar algo parecido con los virus de las vacunas. Una idea simple, pero que nadie había intentado.
Puede que la idea sea sencilla, pero ponerla en práctica fue muy complicado. El proyecto se inició en 2007, y se ha extendido hasta ahora. Comenzaron las pruebas con diversas combinaciones de azúcares y sales, pero el virus se destruía durante el proceso de solidificación de los cristales del azúcar o la sal, o no mantenía sus propiedades con el tiempo.