Con el propósito de disminuir la contaminación ambiental y al mismo tiempo combatir la plaga de lirio acuático la cual es considerada como una de las más incontrolables por su alta capacidad de reproducción, para ello el estudiante José Alberto Espejel Pérez creó un método que convierte esta planta en biocombustible.
El fin de dicho descubrimiento es que este producto pueda utilizarse como una vía segura que sustituya los combustibles hechos a base de hidrocarburos y que además tenga una producción y alcance accesible para toda la población.
El proyecto se encuentra con la patente en trámite y se espera que en este año pueda concluirse oficialmente.
El estudiante menciona que en otros países ya utilizan el etanol hecho con caña de azúcar, maíz y otros residuos, aplicándolos como «aditivos en la gasolina o aplicándolo directamente al motor».