Cada vez más cerca se encuentra la Copa Mundial de Fútbol Qatar 2022 y la organización no solo está trabajando en la infraestructura de los estadios sino que también se ocupan de los hospedajes para los turistas que arribarán al país asiático.
Por ello se a presentado uno de los proyectos más innovadores. Serán 16 hoteles flotantes los que se construirán en las costas de Qetaifan Island North, cerca del Estadio Internacional de Lusai, lugar donde se llevará a cabo el partido inaugural y la gran final del torneo.
Diseñados por Qetifan Projects, una subdivisión de la compañía hotelera más grande de Qatar, Katara Hospitality y la compañía especializada en métodos de construcción alternativos Admares, estos alojamientos temporales, que estarán alimentados por energíoa solar, están pensados para dejar la menor huella de carbono posible.
Cada uno de estos edificios contará con cuatro plantas con 101 habitaciones –lo que supone un total de 1.616– y una estructura de 72 metros de largo por 16 de ancho distribuidos en un restaurante y un lounge bar. El interior de cada uno de estos hoteles está firmado por la compañía finlandesa Sigge Architects, desde donde se proponen integrar la tecnología más moderna de ensamblaje flotante con un diseño moderno y muy actual.
Además de los hoteles flotantes se diseñan las que se han dado en llamar “fan villages” o “aldeas para fans”, que alternarán instalaciones temporales y permanentes, por ejemplo, con estructuras y tiendas de campaña tipo glamping como las que se montan durante los grandes festivales de música, y que ofrecerían alojamiento adicional para entre 10.000 y 15.000 turistas más.
Por otro lado, los viajeros que prefieran dormir flotando tendrán también la chance de hacerlo. Los organizadores comunicaron que tendrán a su disposición dos cruceros con 4000 habitaciones que estarán amarrados en el puerto de Doha mientras se desarrolla el torneo. Y las personas que se alojen en ellos, tendrán incluidos los traslados en micro a los ocho estadios.
Los barcos lujosos incluyen tres piletas, cuatro bañeras de hidromasaje, una cascada en el vestíbulo del Jardín Zen, un auténtico bar de sushi japonés, un gimnasio de última generación, mini golf, cancha de tenis, cancha de baloncesto y sala de póker.