Una ballena es tan importante para combatir el cambio climático como los bosques con miles de árboles, ya que estos mamíferos generan una captura de carbono impresionante en su trayecto de vida en la que se puede alcanzar hasta los 200 años.
Cuando una ballena muere esta se hunde y con ella se lleva 33 toneladas de CO2, de la cual retira este gas de la atmósfera durante siglos. Si se realiza la comparación con un árbol este absorbe 22 kilogramos de CO2.
Si se pone en una balanza el cambio climático que estamos presentando con el valor de una gran ballena equivalente a dos millones de dólares, es un costo muy bajo considerando su contribución al combate al cambio climático.
Con esta información diferentes autoridades, están proponiendo crear un monto financiero para promover su reproducción y ayudar con su protección ya que algunas ballenas se han reducido hasta el 3 por ciento de su población.