Xbox Series X es un gran salto respecto a generaciones de consolas anteriores, ya que no se trata solo de hacer que los juegos se vean mejor, sino de hacer que los juegos también sean mejores.
Cada generación de consolas mejora la velocidad y la calidad de los gráficos de la anterior, pero el nuevo diseño de Microsoft parece que va más allá y promete una mejora de velocidad, que dará un salto cualitativo respecto anteriores generaciones, del que se verán especialmente beneficiados los videojuegos de mundo abierto como «Final Fantasy XV», «Assassin’s Creed Odyssey» o «Red Dead Redemption 2».
La nueva consola cuenta con una gran potencia, incluye un aumento de rendimiento con una CPU de 8 núcleos (3.8 GHz) y una GPU de 12 Teraflops, que será capaz de reproducir juegos con 60 fotogramas por segundo (pero podrá soportar hasta 120) y gráficos 4K.
Esta nueva consola, que al igual que la Ps5 contará con un disco duro sólido, tendrá una memoria interna de 1TB y una memoria extraible de 1TB.
El incremento de velocidad de la nueva consola, que dará un salto cualitativo respecto anteriores generaciones, se verá especialmente beneficiados los videojuegos de mundo abierto como «Final Fantasy XV», «Assassin’s Creed Odyssey» o «Red Dead Redemption 2».
Las mejores técnicas implementadas conseguirán que estos videojuegos -los más complejos técnicamente- sean más dinámicos, más grandes y reales.
Xbox Series X, que saldrá a finales de año y de la que se desconoce el precio, será además retrocompatible, es decir, que permitirá jugar a todo el catálogo de juegos de las anteriores Xbox.