Los investigadores del Instituto Zuckerberg para la Investigación del Agua de la Universidad Ben Gurion del Negev (BGU), los excrementos humanos crudos pueden convertirse en un combustible seguro y reutilizable.
El año pasado realizaron una investigación similar sobre excrementos de aves de corral, en el cual se ha definido un proceso que emplea carbonización hidrotermal (HTC) para calentar los desechos humanos sólidos crudos en una «olla a presión» que convierte los excrementos en hidrocarburo.
Se sometió los residuos crudos a través de HTC a tres temperaturas (180, 210 y 240 ° C) y tiempos de reacción (30, 60 y 120 minutos), se deshidratan los sólidos, creando una sustancia sólida combustible conocida como hidrocarburo (se puede utilizarse para calentar y cocinar en el hogar), así como un líquido de fase acuosa rico en nutrientes.
La reacción que se tiene en el hidrocarburo esteriliza el material de desecho, por lo que es seguro manejarlo, explica Amit Gross, quien es el nuevo director del Instituto Zuckerberg:
Los excrementos humanos se consideran peligrosos debido a su potencial para transmitir enfermedades. Si bien es rico en nutrientes de materia orgánica como nitrógeno, fósforo y potasio, los desechos humanos también contienen micro contaminantes de productos farmacéuticos, que pueden provocar problemas ambientales si no se eliminan o reutilizan adecuadamente.