Valoradas como Patrimonio de la Humanidad según la UNESCO, el grupo de islas Tristan da Cunha, se han convertido en un importante santuario marino. Específicamente el centro de ellas que se extiende 265,347 millas cuadradas y que ahora es el lugar protegido para animales más grande del atlántico. Un hecho que el gobierno del Reino Unido estableció el pasado 12 de noviembre.
La iniciativa proviene de Royal Society for the Protection of Birds y la Pristine Seas Initiative de National Geographic. En un intento por lograr el objetivo de proteger el 30% de la población mundial de océanos para el 2030.
Este nuevo santuario marino es el cuarto más grande del mundo. Casi 700.000 kilómetros cuadrados de sus aguas se unirán al Cinturón Azul de protección marina del Reino Unido.
SANTUARIO MARINO, UNA GRAN GANANCIA PARA LA CONSERVACIÓN
James Glass, uno de los jefes Tristan da Cunha, dio la bienvenida a la asociación y comparte que la vida en la isla siempre se ha basado en la relación con el mar. El isleño dijo que el mar es su recurso vital para la vida, la economía, la instancia y la supervivencia a largo plazo. Razón por la cual, la comunidad protege completamente el 90% se sus aguas y se sienten orgullosos de poder ayudar en la preservación de la salud de los océanos.
En un estudio reciente de la Universidad de California la National Geographic Society, se comprobó un hecho que se había estado estudiado por varios años. Prohibir la pesca en el 5% o más del océano aumentaría para el futuro las capturas mundiales de pescado en al menos un 20%.
Por otra parte, el Ministro de Medio Ambiente del Reino Unido Lord Goldsmith, describió el santuario marino como una ganancia para la conservación de especies y dijo:
“Estamos aspirando la vida del océano a un ritmo espantoso, por lo que esta nueva área marina protegida es realmente un gran logro para la conservación y un paso de importancia crítica para proteger la biodiversidad y los ecosistemas del mundo”.
Este archipiélago es el hogar de alrededor de 245 personas de ascendencia italiana, holandesa, británica y estadounidense, de acuerdo a la información de Good News Network .
UNA PEQUEÑA COMUNIDAD CON UN GRAN PROPÓSITO
Enric Sala, el explorador residente la National Geographic Society, asegura que la población de Tristan da Cunha es un testimonio para el mundo. Ya que es admirable que una de las comunidades más pequeñas del mundo pueda hacer la mayor contribución a la conservación marina global de este año.
Sala resaltó que los habitantes de la isla se ganan la vida mediante la pesca sostenible de langosta, que está excluida de la zona protegida.
Y concluyó en que todos podemos mirar a Tristan en busca de inspiración mientras que el mundo comienza una década de trabajo. Un esfuerzo que buscará proteger el 30% del océano global para el 2030.
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